El Santuario de Vida Silvestre de Keo Seima, en el este de Camboya, protege casi 300.000 hectáreas de bosque. Anteriormente conocida como Área de Conservación de la Biodiversidad de Seima (2002 - 2009) y Bosque de Protección de Seima (2009 - 2016), esta zona alberga una gran variedad de fauna y flora donde, además, los bosques y montañas dan cobijo a las comunidades indígenas.

Para los Bunong que viven allí, el bosque es una fuente clave de ingresos y desempeña un papel fundamental en sus creencias espirituales.

La región aúna dos zonas geográficas de importancia natural. Por un lado, los montes Annamite destacan por sus vastos bosques de hoja perenne y sus elevados niveles de especies locales. Por otro lado, el bosque seco del Mekong es crucial para que sobreviva la fauna local típica de la región.

En la zona protegida por este proyecto se pueden encontrar 84 especies amenazadas o en peligro de extinción a escala mundial, entre ellas elefantes asiáticos, primates, ganado salvaje y aves como el ibis gigante y el pavo real cuelliverde. Además, la mayor población mundial de langur de patas negras y gibón crestado de mejillas amarillas vive en este área.Sin embargo, la biodiversidad local y las comunidades dependientes de los bosques acusan cada vez más los estragos de la explotación de recursos como la tala, la caza y la pesca.

La labor de conservación del Santuario de Vida Silvestre de Keo Seima ha tenido un enorme impacto tanto en la reducción de emisiones como en la protección de la fauna y las comunidades locales. Gracias a su labor, se ha evitado la emisión a la atmósfera de más de 20 millones de toneladas de CO₂ y se han salvado de la destrucción unas 25.000 hectáreas de bosque. Al proteger estas zonas de la deforestación se evita la también liberación de emisiones retenidas en la biomasa y el suelo de los bosques.

El proyecto ha querido ir un paso más allá, y retribuye a las comunidades locales de forma que se generen oportunidades de empleo y apoyando programas de educación y formación. De hecho, se ha creado una empresa de ecoturismo que apoya a estas comunidades.

A través del programa "Dinero para las comunidades", que reparte los ingresos de la venta de créditos de carbono, el santuario ha distribuido casi 1.000.000$ (unos 920.0000€). Los fondos van directamente a los habitantes de la región, quienes cuentas con la oportunidad de decidir a qué se destinarán. La iniciativa ha apoyado actividades como el desarrollo de la sanidad, la educación y la construcción de pozos de agua potable y puentes.

El Santuario de Vida Silvestre de Keo Seima es uno de los muchos proyectos positivos para el clima a los que contribuye Bumper a través de su asociación con Ecologi.