¿Qué es el BNPL y cómo funciona?

Para cualquier negocio unos de los inconvenientes del día a día en el trabajo son los proyectos que que el cliente rechaza, propuestas que se pierden, ventas que no se formalizan, etc. 

Las empresas tienen que enfrentarse recurrentemente a diversas objeciones por parte de sus clientes a la hora de adquirir un bien o servicio, principalmente por un único factor que parece estar por encima de todo el esfuerzo, la experiencia y la calidad que hay puesta en el trabajo: el precio. 

Y no es que todo tenga que ver con el dinero, sino con la propia percepción del consumidor sobre si el producto o servicio a comprar es caro o no. Hay restaurantes que cobran más de 300€ por un menú, y lejos de ser un obstáculo para sus comensales, es un signo de exclusividad. 

Sin embargo, no ocurre con lo mismo con la reparación de un coche, que más que un capricho exclusivo es una necesidad en la mayoría de casos. Equilibrar la oferta, se convierte un despliegue de habilidades para el concesionario o taller puesto que tiene que saber muy bien cómo ofrecer el precio justo para que el producto se compre, dejando un margen de beneficio razonable y entendido como adecuado para que el negocio en sí sea sostenible. 

Pagos fraccionados, una alternativa de compra

El precio (lo que se paga por algo) y el valor (lo que vamos a ofrecer a cambio de ese precio) son dos cosas muy diferentes. Normalmente, el valor de un producto es mayor que su precio, para que el cliente perciba que está ante una buena oportunidad si adquiere ese bien o servicio. 

No obstante, el precio supone en ocasiones una barrera tan importante que, incluso cuando el cliente sabe que es razonable, protesta por el mismo, pide un descuento o sencillamente, declina la oferta al no puede permitírsela. 

Por ello, se han ideado sistemas para conseguir que el precio pase a ser una preocupación menor, algo secundario. Los préstamos, las tarjetas de crédito, la financiación y otros métodos suponen una forma mucho más relajada de pagar un producto o servicio, con una ventaja evidente frente realizar pago completo al instante de la compra: dividir el coste en cuotas asequibles.

Pero no todo son buenas noticias, con este tipo de pagos vienen los intereses. Ocurre con las hipotecas para viviendas, con los préstamos para negocios e incluso con las letras de los vehículos, donde realmente lo que hacemos es es pedir dinero prestado a una entidad para poder dividir ese pago y adquirir algo que, de otra forma, sería impensable. Estos intereses se suman al precio total por lo que, en la inmensa mayoría de ocasiones, se acaba pagando incluso más por ese producto o servicio que si se hubiera realizado la compra en el momento.

Además, la mayoría de entidades añaden ciertos requisitos indispensables para poder acceder a estos créditos, siendo conscientes de el cliente puede ver comprometida su capacidad para solicitar dicha financiación. Entonces, ¿no sería ideal contar con un sistema que permitiese el pago en cuotas sin cobrar intereses, y que tampoco ponga trabas a la hora de formalizar la solicitud? Pues ese sistema ya existe, y se llama BNPL, Buy Now, Pay Later. 

¿Qué es BNPL? Compra ahora, paga después

BNPL son las siglas de Buy Now, Pay Later, que traducido resulta en algo tan sencillo como: Compra Ahora, Paga Después. Se trata de un sistema relativamente joven que supone la evolución y perfeccionamiento de otros métodos de pago todavía vigentes, con grandes ventajas respecto a ellos. Porque al fin y al cabo, uno ya compra ahora y paga después cuando utilizando una tarjeta de crédito u otros sistemas de pagos fraccionados; eso sí, a costa de unos intereses. 

La gran diferencia es que BNPL es una financiación libre de intereses. Las empresas que ofrecen este modelo de pago se encargan de crear diversas fórmulas para que el comprador pueda adquirir el producto o el servicio sin preocuparse por pagar de más, dividiendo el pago en cuotas al cero por ciento de interés. 

Esto supone un avance también con respecto a la propia concepción que el cliente tiene sobre la financiación, donde la mayoría son reticentes a solicitar financiaciones con tal de evitar precisamente los altos intereses que suelen llevar acoplados. 

El mercado está en evolución continuamente y nuevos tiempos requieren nuevas formas de financiación. El sistema BNPL es una consecuencia de los fallos de sistemas anteriores, que intentan ser corregidos y adaptados a los nuevos tiempos.  

Por tanto, no es casualidad que el Compre Ahora, Pague Después se haya convertido en uno de los sistemas de financiación que más ha crecido en los últimos cinco años. 

FinTechs como Klarna, Afterpay, Affirm o PayPal, especializadas en opciones de pagos, han sido pioneras en implementar este sistema, llegando a dominar el sector. Como consecuencia, el crecimiento de estos negocios ha sido exponencial, lo que les ha valido en ocasiones la denominación de “unicornios”.

Si bien es un sistema que lleva años desarrollándose en el mundo online, ha conseguido traspasar las fronteras virtuales para convertirse en una nueva forma de financiación también para cualquier negocio físico como una de las mejores fórmulas tanto para los clientes como para los comercios.

Las ventajas de BNPL

En un momento tan crítico como el que vivimos actualmente, conseguir elevar la facturación de un negocio es una de las únicas opciones para sobrevivir en mercados tan competitivos. El acceso a nuevos clientes se hace indispensable, por lo que ofrecer métodos alternativos de pago supone un avance significativo. 

Entre las ventajas del método BNPL nosotros queremos destacar las siguientes:

• Comodidad: como buen sistema de pago fraccionado o aplazado, el método BNPL permite a los compradores disfrutar de un pago mucho más cómodo.
  De hecho, ya hemos visto que hay diferentes sectores, como el de la compra de automóviles o de vivienda, que requieren de este tipo de sistemas de financiación para ser factibles. 
• Sin intereses: es la ventaja más importante y cualitativa del sistema BNPL. De hecho, surge como una necesidad de adaptación al nuevo mercado, donde los jóvenes están empezando a comprar más, pero no a costa de endeudarse con sistemas que involucren intereses. 
  Este sistema se destaca por solucionar las dos principales objeciones del comprador habitual para servicios de alto valor: el precio y los intereses añadidos.
• Más compras: la tasa de conversión de compras de medio y alto valor aumenta considerablemente gracias a este método. Y es que dando acceso a esos potenciales clientes a una fórmula de pago tan cómoda y segura, el número de compradores aumenta sustancialmente. 
  Es beneficioso tanto para ellos como para los propios negocios, haciendo crecer la facturación. De hecho, también se aumenta la satisfacción de los clientes y en consecuencia, el número de compras que cada uno de ellos realiza, por tanto se mejora la tasa de fidelización simultáneamente. 
• Rápido y sencillo: el sistema BNPL supone también un método muy rápido a la hora de comprar un bien o servicio. No se requieren los documentos y/o papeleo burocráticos presented en otros métodos de financiación ya existentes. 
  En tan solo un par de clicks el usuario accede puede disfrutar de lo que ha comprado prácticamente al instante, sin que ese impulso de compra se vaya, mejorando la experiencia del propio cliente. 

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Traducida Por Claudia

Claudia lleva más de dos años traduciendo contenido para Bumper, combinando su pasión por los idiomas con su talento para contar historias